Se presenta un estudio sobre 200 casos de infarto cardíaco, para tratar de determinar las formas clínicas de presentación, correlacionándolas con la localización electrocardiográfica, antecedentes patológicos, factores predisponentes del infarto, complicaciones, así como modo egreso. Se comprueba que hubo predominio en parientes de la raza blanca, sexo masculino y procedencia urbana, sobre todo en la región Camagiiey-Vertientes. así como en los que se encuentran comprendidos entre los 40 y 70 o más años de edad. Se recomienda que para los pacientes que hayan sufrido un infarto cardíaco se establezcan consultas de seguimiento.

Se informa el primer caso, en nuestro medio, portador de una otitis externa maligna; se hace un análisis de las características clínicas de esta entidad y se destaca ia importancia de mantener un alto índice de sospecha que nos permita un diagnóstico precoz y un tratamiento adecuado.

Se señalan las cifras tensionales que, de acuerdo a la edad, determinan la hipertensión. Se destaca que para su estudio se ha dividido en hipertensiones esenciales o de causa desconocida y secundaria o de causa conocida, habiéndose reducido la primera, en relación con los avances de la medicina. Se señalan los factores etiológicos de las hipertensiones esenciales y secundarias, así como el método a seguir para controlar precozmente esta patología.

Se estudiaron 38 pacientes con diagnóstico histológico de cirrosis hepática y sin manifestaciones hemorragíparas en el período comprendido entre enero de 1971 y junio de 1972 de los cuales 22 mostraron alguna alteración en el estudio de la coagulación. Se halló que Ja trombopenia y el déficit de los factores VII y X fueron los hallazgos más frecuentes. Uno de los casos era portador de una coagulación intravascular crónica con fibrinólisis reactiva. Se destaca la importancia del estudio de la coagulación como parámetro de función hepática va que puede encontrarse' alterado aun cuando otros estudios resulten negativos. Se recomienda el estudio sistemático de la coagulación en pacientes cirróticos, aun en ausencia cíe manifestaciones purpúrieas o hemorrágicas.

Se presentan cuatro casos de hipotiroidismo primario y galactorrea, asociados, en dos de ellos, a amenorrea, representando los casos 15 y 16 reportados en la literatura, y los primeros en nuestro medio. Se destacan las características clínicas que aparecen al inicio de la enfermedad, así como la importancia diagnóstica de la respuesta de los síntomas al tratamiento sustitulivo. Uno de los casos presentó silla turca balonada con dorso adelgazado, lo que es de rara observación en el hipotiroidismo primario y obliga a su diferenciación con el hipotiroidismo secundario de causa tumoral hipofisaria. Se discuten las distintas hipótesis que tratan de explicar la hiperproducción de prolactina en estos casos. Se recomienda investigar la función tiroidea en todo paciente portador de galactorrea, sobre todo si está asociada a amenorrea.

Se estudió la excitabilidad cardíaca en ranas bajo la acción de propranolol y guanetidina. Se compararon los resultados con un grupo testigo. La excitabilidad se consideró como la capacidad de respuesta a estimulaciones breves y de tensión crecientes, en diferentes momentos del ciclo cardíaco. El grupo bajo la acción del propranolol mostró una disminución significativa de la estimulación en comparación con el grupo testigo. El grupo bajo la acción de la guanetidina no mostró cambios significativos desde el punto de vista estadístico.